miércoles, 23 de abril de 2014

PANORAMICA

PANORAMICA DE CHARALA




Foto tomada desde la parte sur oriental parte de la loma de las alegrías





NEUGATAS CHARALEÑAS





NEUGATAS CHARALEÑAS






Deporte autoctono Charaleño creado en el año 1971, practicado en el río Taquiza.
Se realiza una competencia anual en el mes de enero, donde participan deportistas a nivel nacional


SALIDA DEL CALIZ

SALIDA DEL CALIZ





Parte alta del salto del cáliz a 6 kilometros de el parque principal vía San Gil parte alta vereda Tinaga  

SALTO DE RIACHUELO


SALTO DE RIACHUELO





Cascada ubicada en el corregimiento de Riachuelo a 11 kilómetros del parque principal vía Coromoro

CASCADA EL CALIZ


CASCADA EL CALIZ





Cascada ubicada en la vereda Tinaga a 5 kilometros de el parque principal vía San Gil

POZO CAMELLO


POZO CAMELLO




Pozo ubicado en el Rìo pienta a 1 kilometro de el parque principal vía Ocamonte 

RIO CAÑAVERAL


RIO CAÑAVERAL



Rìo ubicado en el corregimiento de virolin a 17 kilometros de el parque principal de charala

POZO NEGRO


POZO NEGRO




Pozo ubicado en la  vereda la laguna a 1 kilometro de el parque principal de charalá vía piscina municipal 

POZO LAJAS



POZO LAJAS





Ubicado en la vereda bagres a 2 kilometros del parque principal via piscina municipal



POZOS GALLO

POZO GALLO






Pozo Gallo: Es un sitio donde acuden muchas personas diariamente o principalmente fines de semana ha pasar un tiempo agradable en familia, entre compañeros ...




miércoles, 9 de abril de 2014

VIROLIN PARQUE NACIONAL

VIROLÍN,

 UN NUEVO PARQUE NACIONAL

Unas doce mil hectáreas de bosques nativos, que aún conservan los rasgos originales de las selvas tropicales húmedas, enclavadas en las estribaciones de la cordillera Oriental, se convertirán en el santuario ecológico de Virolín y en un nuevo parque nacional abierto al turismo. Se trata de los únicos bosques de robles del país. Cubren un extenso territorio de cinco municipios de Santander y Boyacá.

Para el efecto, se busca unir esfuerzos entre el Gobierno, el Congreso y la Universidad Nacional, a instancias de la fundación Natura, para preservar el equilibrio de la fauna, la flora y las condiciones propias de la zona y detener el avance de los depredadores y la tala desmesurada que está agotando, además, las fuentes de agua.
El lugar, situado a más de tres mil metros de altura sobre el nivel del mar, es punto clave de equilibrio natural. Allí, en medio de los frailejones, nacen cuatro importantes ríos que atraviesan la geografía de Santander: Fonce, Pienta, Guillermo y Virolín, que reciben a su vez las aguas de cientos de quebradas que son fundamentales para la vida de parte de los habitantes del departamento.
El sector está dominado por la cuchilla de la Rusia, desde donde se divisa a Charalá, Encino y Gámbita (en Santander) y Duitama y Sogamoso (en Boyacá).
Gracias a su quebrada geografía, se ha mantenido casi virgen el bosque de robledales situado en el corazón del parque, sobre unas 840 hectáreas. De estos bosques autosubsistentes también dependen unas 19 especies de mamíferos, entre los cuales se destaca el oso de anteojos, además de tigrillos, tapires y especies menores de vertebrados; 30 especies de aves debidamente clasificadas, entre las cuales sobresale la perdiz, Odontophorus Strophium, especie que desapareció en México en 1915, y seis familias de reptiles y anfibios.
Esta clasificación y el censo fueron posibles gracias a los estudios que realizan desde hace varios años el Instituto de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional, bajo la dirección de los botánicos Orlando Rangel y Jaime Aguirre y de los zoólogos Pedro Ruiz y Alberto Cadena.
Con base en los estudios concluidos por los científicos colombianos, se pidió la financiación para la conservación del área, desde el año de 1988, y su afiliación al Consejo Internacional para la Protección de las Aves (CIPA).
El área está caracterizada por la variedad de temperaturas (de 12 a 30 grados centígrados), lo cual permite la preservación de la más variada vida vegetal y animal.
Entidades como el Instituto de los Recursos Naturales Renovables y del Medio Ambiente (Inderena) han expuesto la necesidad de crear un cordón de protección sobre el parque de Virolín, dado que en ninguna otra parte del país se presentan sus características.
Santuario ecológico Se calcula que de los bosques andinos, solamente queda en pie un cinco por ciento de la superficie original, según los estudios que han servido de base para declarar la zona como un santuario ecológico.
De las 12 mil hectáreas que se pretende proteger, 4.412 pertenecen a la empresa siderúrgica de Paz del Río, la entidad que más ha contribuido a la tala del bosque natural para sus procedimientos. Ahora se pretende que estos territorios sean cedidos para la conformación del parque nacional, ya que deben ser sometidos a un proceso de reforestación y de recuperación de la vida animal.
Las plantas inferiores también han sido estudiadas en el lugar y se han logrado identificar 104 especies de 41 géneros y 21 familias.
Los estudios practicados en la zona describen también a Virolín dentro del grupo de las que tienen pocas colecciones botánicas (menos de 50 por kilómetro cuadrado), con grandes probabilidades de extinción. Por esto se justifica la inclusión del área en la lista de los Centros de Diversidad de Plantas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y el World Wildlife Fund.
En todos los lugares, desde los más altos hasta los más bajos, en todos los flancos, se observa una abundante regeneración de los robles de dosel y una abundancia de orquídeas.
Por ello, para definir los parámetros respecto de la vinculación de Virolín al sistema de parques nacionales, en la categoría de santuario de fauna y flora, se realizó el 20 y 21 de marzo, un foro comunitario, con la asistencia de los gobernadores de Santander, Juan Duarte Torres; Boyacá, Alfonso Salamanca Ilach; los alcaldes de los municipios respectivos; los gerentes del Inderena y del Incora; y el senador Gustavo Galvis, abanderado del proyecto en el Congreso.




HISTORIA

HISTORIA Y CULTURA DE NUESTRO PUEBLO 

Charalá esta ubicada a 37 km de San Gil por una vía pavimentada a una altura de 1300 mts sobre el nivel del mar temperatura promedio 22 grados centígrados. Fundada El 10 de diciembre de 1701, llamada cuna de la libertad este apelativo, se le reconoce por participar en los hechos históricos mas importantes que ocurrieron en Colombia y a nivel latinoamericano como fueron: La Revolución Comunera 1774 y 1781, liderada por el hijo de nuestra tierra JOSE ANTONIO GALÁN ZORRO. El Grito de Independencia 20 de julio 1810., aporte que hace el ilustre charaleño, JOSE BLASS ACEVEDO Y GOMÉZ. La Batalla del Pienta el 04 de agosto de 1819, preámbulo que realiza el pueblo Charaleño para poder lograr el triunfo de la batalla de Boyacá el 07 de Agosto.


Charalá cuenta con un gran potencial Hídrico de 6 ríos y 47 quebradas, además el santuario de flora y fauna en virolin el cual cuenta con rios de aguas rojas, 250 especies de aves, gran cantidad de especies leñosas, 7 especies de fauna en vía de extinción como el oso de anteojos, la Danta, Acodón, Tigrillo, Venado Rojo y el Cóndor. Gran potencial en flora y orquídeas con más de 140 especies, el Páramo de la Rusia con 13 especies de frailejón y 7 lagunas.También en actividades extremas como torrentismo, neogatas y espelismo.




 

CHARALA PATRIMONIA HISTORICO Y CULTURAL DE LA NACION

Charalá, patrimonio histórico y cultural de la nación


El Senado de la República, a través del último debate reglamentario, aprobó la iniciativa del Representante Holger Díaz,  que declara Patrimonio Histórico y Cultural de la Nación al municipio de Charalá del departamento de Santander.
Después de las discusiones en las Comisiones Cuartas Constitucionales y en las Plenarias de Cámara y Senado, el proyecto ha cumplido con los requisitos legislativos para convertirse en Ley de la República.
El texto presentado por el Congresista Díaz  autoriza al Gobierno Nacional, a través del Ministerio de Cultura, para asesorar y apoyar a la Gobernación de Santander y al municipio de Charalá en la elaboración, tramitación, ejecución y financiación de proyectos de patrimonio material, e inmaterial; de remodelación, recuperación y construcción de los monumentos e infraestructura cultural e histórica. Las principales obras referenciadas en la ley son la Construcción del Parque Temático Lineal, como un complejo turístico, cultural e histórico donde se recreen los acontecimientos con los que Charalá contribuyó a la gesta libertadora; Restauración de la Casa de la Cultura “José Acevedo y Gómez” y de la Casa de José Antonio Galán Zorro.
En el Acuerdo para la Prosperidad que se realizó en agosto del 2012 en el Socorro, Santander, el Presidente de la República, Juan Manuel Santos Calderón se comprometió a visitar son su familia el municipio de Charalá. El Representante Holger Díaz, como principal gestor, se encuentra trabajando para que el primer mandatario se una a la celebración de la Batalla del Pienta el 4 de agosto y que sea el municipio, el lugar donde se sancione la Ley.   
Gracias al reconocimiento de parte del Congreso de la República, Charalá reivindica su importancia histórica y junto a Cartagena de Indias, Ciudad Perdida, La Candelaria, Popayán, Mompox, Santa Fe de Antioquia y Villa de Leyva, se integra al grupo de poblaciones consideradas Patrimonio de la Nación. 

batalla de charala

Historia de Charalá


Charalá
 es un municipio de Colombia perteneciente al departamento de Santander. Es llamada Cuna de la Libertad de América debido a sus aportes en las luchas de la revolución de los comuneros y la Batalla del Pienta el 4 de agosto de 1819. Recibió su nombre en honor al cacique "Chalala", de la tribu de los guanes.

Allí nacieron José Antonio Galán, el más venerado de los comuneros, José Acevedo y Gómez, el Tribuno del Pueblo y Antonio Vargas Reyes, quizá el médico colombiano más importante del siglo XIX.

El pueblo santandereano de Charalá tiene muchas razones para reclamar un puesto de honor en los textos de historia de Colombia.  Para comenzar, a sus indígenas chalalaes, de la gran familia guane, se refiere en términos elogiosos, tanto por la elegancia de su porte como por su disposición pacífica.
Adicionalmente, en esta ciudad de la antigua provincia del Socorro nacieron tres grandes personajes: el primero fue José Antonio Galán, el más venerado de los líderes comuneros, el segundo, José Acevedo y Gómez, conocido como el Tribuno del Pueblo por sus palabras incendiarias del 20 de julio de 1810, aquel famoso "si no aprovecháis estos momentos de efervescencia y calor...", el tercer personaje fue Antonio Vargas Reyes, muy probablemente el médico colombiano más importante del siglo XIX, creador de la facultad de medicina que se convertiría en 1868 en la Universidad Nacional.

Pero vamos a dejar al lado estos datos biográficos para rescatar una batalla de la Independencia que se puede decir es la mayor contribución de Charalá a la historia nacional.
Se trata de la batalla del Pienta, cuyos combates se iniciaron al amanecer del 4 de agosto de 1819, apenas tres días antes de la mucho más famosa Batalla de Boyacá.

El escenario bélico incluyó un puente entechado sobre el rocoso río Pienta, cuyas aguas van a dar al Fonce primero, y luego al Chicamocha. Más santandereano para dónde.  Por ese puente pasaba el camino real para ir del Socorro a Tunja, en su ascenso hacía los elevados páramos que separaban las dos provincias, hoy departamentos de Santander y Boyacá.

Pero antes de seguir con los detalles de esta olvidada batalla, vale repasar la situación política de entonces. La provincia del Socorro llevaba años de opresión y de rebeldía armada; aquí no se veía paz desde la muerte ignominiosa de José Antonio Galán, casi 40 años atrás.  No era en vano que el virrey Sámano hubiera encargado la comandancia del Ejército al curtido coronel español Lucas González.   A su mando tenía algunos de los soldados más bien entrenados de todo el virreinato de la Nueva Granada.
Fueron los hombres de González los que capturaron sin dificultad, en su hacienda de El Hatillo, a la reconocida dama Antonia Santos Plata, acusada de ser auxiliadora de las temibles guerrillas de Coromoro. Para los días de esta batalla no había pasado una semana, siquiera, desde su ajusticiamiento en el parque principal del Socorro. La saña de esa ejecución pública atizó sin duda el rencor de las guerrillas, que dirigía Fernando Santos, hermano de la inmolada Antonia.
Por aquel entonces se vivían momentos críticos en los planes de independencia. Los ejércitos de Bolívar habían logrado cruzar, con sus hombres maltrechos, el páramo de Pisba, y se fortalecían con reclutas de la provincia de Tunja. Marchaban ya hacia la capital del virreinato: Santafé de Bogotá.
El principal obstáculo para el avance de Bolívar eran ahora las tropas del coronel José María Barreiro, con quien se habían enfrentado ya en el Pantano de Vargas, diez días antes de los hechos en Pienta. Tras las serias bajas en el Pantano, ese día 4 de agosto Barreiro esperaba en Tunja impacientemente la llegada de los refuerzos de las tropas del Socorro.
Pero mientras tanto en Pienta los ochocientos soldados españoles de González se estaban viendo a gatas para avanzar hacia Charalá, en su paso obligado en el camino a Tunja. Los estaba enfrentando un ejército de campesinos charaleños. En número impreciso de mil o más, estos labriegos, en su mayoría sin entrenamiento militar, se lanzaron al combate con más valor que armamento. 
Machetes, piedras, mazos y hasta puño limpio describen las crónicas de los combates que se libraron primero en medio del río y encima del puente, y luego en el camino de retirada de los ejércitos criollos hacia las calles del pueblo, doblegados por el poderío militar español.
Calle por calle y casa por casa fue cayendo Charalá en manos españolas. Sus soldados, en gran medida humillados por ese ejército de espontáneos, se dio al saqueo. Se cuentan historias horrendas de los abusos de la noche del 4 de agosto. Las mujeres charaleñas, como suele ocurrir en las batallas, pagaron aún más cara su rebeldía. En todo caso, centenares de cuerpos de hombres, mujeres y niños quedaron insepultos por doquier al partir las tropas españolas por el camino de Tunja.
Sí, es cierto; fuimos los criollos, y no los españoles, los derrotados en Pienta. Pero no por eso hay que borrar esta batalla de la historia.
El hecho histórico fue que el coronel González no pudo cumplir su cita con Barreiro. Razón tendrá el ex presidente de la Academia Colombiana de Historia, el socorrano Horacio Rodríguez Plata, cuando afirma en uno de sus escritos: 
"¿Qué habría sido del ejército libertador, extenuado después de la batalla del Pantano de Vargas, si en la tarde del 7 de agosto se enfrenta a las tropas de Barreiro aumentadas con las de González? ¿Cuál habría sido la suerte de Colombia si en vez de Barreiro y sus oficiales los prisioneros hubieran sido Bolívar, Santander y Anzoátegui?".
Ahí le dejo la inquietud.

BATALLA DEL PIENTA SERA INSTITUCIONALIZADA

Batalla de Pienta será institucionalizada en ley de la República

Se la dará reconocimiento oficial a los charaleños que diezmaron tropas españolas.

Como un reconocimiento del país al aporte histórico del pueblo de Charalá (Santander) a la Independencia de la patria y a la Libertad de América, la Batalla del río Pienta, que ocurrió el 4 de agosto de 1819, será institucionalizada como acontecimiento nacional por ley de la República.
 
La iniciativa es liderada por el representante a la Cámara, Holger Díaz Hernández, y cuenta con el apoyo del gobernador de Santander, Richard Aguilar Villa y otras personalidades de Santander.
 
Batalla decisiva

El proyecto fue dado a conocer durante la conmemoración de los 193 años de la Batalla del Pienta en el municipio de Charalá, donde el Alcalde hizo una breve reseña histórica sobre el papel decisivo de esta batalla en la independencia de Colombia.
 




"La batalla decisiva de la Independencia ocurrió en Pienta - Charalá ese 4 de agosto, porque los 800 hombres del ejército realista que iban a reforzar las tropas de Barreiro, que combatían contra las de Bolívar en Boyacá, fueron enfrentadas en este sitio (río Pienta) por los rebeldes de Charalá, lo que impidió su paso hacia Boyacá"
 
"Aquí combatieron hombres, mujeres y niños criollos que pagaron con su sangre el precio de la libertad. Fueron más de 300 muertos que quedaron esparcidos por calles, campo y caminos de Charalá, pero valió la pena, porque tres días más tarde las tropas de Bolívar ganaron la  batalla final en el puente de Boyacá, y con ella la independencia de patria", dijo Fabio León Ardila, alcalde de este municipio.
 
Monumento a los Héroes

Como un primer paso a ese reconocimiento, elsábado pasadoaugurado el Monumento a los Héroes de Charalá, una escultura elaborada por el maestro Jaime Guevara, que representa a los mártires José Antonio Galán, Antonia Santos y los 300 inmolados de la Batalla del Pienta, entre otros valientes criollos.
 
El monumento fue instalado a orillas del río Pienta, a la entrada de la población, para que propios y visitantes recuerden que Charalá es Cuna de Libertad.

 

BATALLA DEL PIENTA

En Charalá y lo que fue la Provincia del Socorro, reposan las memorias del llamado ‘régimen del terror’ (1816 a 1819) emprendido por las tropas colonizadoras.

 Allí murieron hombres y mujeres que dieron su vida para obstaculizaron el poderío del ejército español.

Uno de los hechos que marcó para siempre el destino de la guerra de independencia en Colombia y dio un giro a la Batalla de Boyacá, el 7 de agosto de 1819, fue la Batalla del Pienta, el 4 de agosto de ese mismo año.

Este hecho no permitió la llegada de un pelotón de más de 800 hombres comandados por el coronel Lucas González (considerado uno de los militares españoles más sanguinarios de la época) a Santafé, donde eran esperados para reforzar el ejército del coronel, José María Barreiro, y enfrentar a las tropas de Simón Bolívar.

Como otros acontecimientos de la independencia de Colombia, la Batalla del Pienta no tiene el lugar que se merece en la historia. Según el historiador Édgar Cano Amaya, el pueblo charaleño sigue esperando “el reconocimiento y la gratitud de algún gobierno” por estos hechos.

“Aquellos que dieron su propia vida en esa gloriosa epopeya, realmente son los verdaderos héroes de nuestra patria, y a ellos y sus descendientes les debemos la independencia de la República”, añadió Cano Amaya.